jueves, 12 de septiembre de 2013

Crítica de 'Dolor y Dinero' (por Alberto Pérez)


Desde el primer momento en el que se hizo público este proyecto del Sr. Michael Bay, la peli se vendió como una pequeña producción con un presupuesto ajustado alejada de toda la parafernalia que siempre acompaña al peculiar director americano en sus rodajes. En la última década, los autobots y decepticons han ocupado prácticamente la totalidad del tiempo de Bay, y la cinta que nos ocupa era la ocasión perfecta para mostrarnos algo diferente, para demostrar que hay algo más que robots gigantes que utilizan la tierra como su particular ring. 'Dolor y Dinero' es el título de este nuevo proyecto que además me viene como anillo al dedo para la crítica, porque me ha 'dolido' haber pagado 'dinero' por ver semejante despropósito en el cine.
 
Desde el primer momento nos dejan claro que la peli está basada en un hecho real que ocurrió en Miami a mediados de los 90, donde tres culturistas (con un cerebro inversamente proporcional al tamaño de sus músculos) por tratar de perseguir el sueño americano acabaron tomándo la vía fácil llevando a cabo un secuestro express para desplumar a un millonario bastante tocapelotas. ¿El problema? Que nada garantizaba que ese plan saliera bien, y menos si rozas la estupidez humana como pasa en este caso.


Leyendo críticas por Internet, es bastante curioso ver que la mayoría de la gente alaba esta última cinta de Bay hasta el punto de darle el honor de ser la mejor película de su filmografía y de la de los actores que la protagonizan (Mark Walhberg y The Rock). Pues que queréis que os diga amigos, a mí no me ha gustado. De hecho me gustaría parafrasear lo dicho por el crítico A. O. Scott del New York Times, ya que refleja perfectamente mi estado de ánimo tras verla:
 
"Todo te deja pensando si lo que has visto es una película monumentalmente estúpida o una película brillante sobre la naturaleza y las consecuencias de la estupidez humana."
 
Tenemos ante nosotros una historia que es difícilmente creíble pero que por otro lado es forzosamente verídica al estar basada en un hecho real que de hecho hasta en los últimos minutos de la peli nos recuerdan… También entiendo esa moraleja/crítica que quiere darnos Bay sobre el sueño americano y las piedras que uno puede encontrarse en el camino para alcanzarlo, pero no he sabido conectar con el tono que le ha dado a la película. No me ha hecho gracia en momentos en los que teóricamente tenía que hacerlo, y aunque finalmente sí que me he reído ha sido mientras entonaba un WTF?! en toda regla por lo que estaba viendo.

Otro de los principales problemas que la veo es el ritmo desigual que tiene. Su primera hora es interesante no lo dudo, presentándote a los personajes, su modo de vida, sus aspiraciones y la llegada del iluminado plan, pero después el tramo final de la película es mucho más pesado, largo y hasta repetitivo en el que el propio Bay mete todavía más ese humor absurdo que caracteriza a los personajes hasta el final.


No se chicos, esperaba con ganas este último trabajo de Bay tanto por ver lo que hacía el propio director como por los actores que salen, pero sinceramente me he llevado un chasco. Me da la sensación de que cómo parece que Bay va a seguir atado a la franquicia robótica de Hasbro durante muchos años más, éste ha sido su pequeño pero 'hiperciclado' capricho. Como siempre os digo, id a verla para sacar vuestras propias conclusiones, pero eso sí, para todos aquellos que como digo alaban esta peli como la mejor de su filmografía, lo respeto totalmente, pero para mí es y creo que será siempre 'La Roca', esa pedazo de joya de los 90…

miércoles, 4 de septiembre de 2013

"¿La Gran N?" (por Enrique Montero)

 
Comenzaré indicando que ésto es un breve artículo de opinión amigos, que no pretendo zaherir a la bestia acorralada y llevar a la debacle a la empresa de la que voy a hablar. Creo que algunos ya sabrán sobre qué emblemática compañía va a versar este artículo. Todo tiene un comienzo y aquí paso a relatar la vicisitud que me acontece. Tengo por costumbre al levantarme encender la línea de datos del móvil y ver que ha pasado en el mundo mientras disfrutaba de mi plácido descanso nocturno. Con ojos vidriosos y somnolientos empecé a ojear una de mis webs de referencia en lo que se refiere al sector de videojuegos. Tal estupefacción cambió mi semblante tornándolo en un gesto de sorpresa, un auténtico WTF?!, y lo que parecía una prometedora mañana sosegada en mi periplo hasta el puesto de trabajo, se tornó en indignación al leer las siguientes líneas:
 
"A Reggie Fils-Aime no le preocupan Playstation 4 y Xbox one".
 
Una vez recuperado mi asombro finalicé mi desayuno y sólo podía pensar en tan desacertadas palabras mientras el agua de la ducha despejaba mi mente, para posteriormente seguir con mis cavilaciones camino del transporte público. ¿Éste hombre ha perdido el norte? ¿Compara el catálogo de lanzamiento de consolas de verdadera nueva generación con lo que sacó Nintendo en su Wii U? ¿Se remite al pasado con el relativo éxito de la Wii? ¿Qué ha pasado con el anuncio de la 2DS? Había muchas preguntas que se agolpaban en mi abotargado cerebro y que pugnaban una respuesta o al menos una forma de expresar mi indignación, y he aquí que mis compañeros me han brindado esta oportunidad.
 

Muchos estaréis temiendo estar delante de lo que comúnmente llaman un troll, un ser despreciable que se nutre de las desgracias ajenas para caer sobre la yugular de los desarrolladores o empresas que no son de su agrado, pero no amigos, esa no es mi intención ya que mi relación con la gran N es entrañable y tengo muy buenos recuerdos de su excelente SuperNintendo o la simpar Gamecube. Creo que Nintendo ha sido la compañía que más ha arriesgado en su hardware, siempre han sido punteros en tecnología guardando la insigne labor de crear títulos legendarios de una forma artesanal y cuidando hasta el más mínimo detalle. No ha habido empresa que haya conseguido mantener ese leve equilibrio de cuidar el contenido sin mermar la calidad de continente. Es cierto que innovaron en cuanto a la jugabilidad con la Wii, que luego ha sido imitada por Sony y Microsoft con los respectivos 'Move' y 'Kinect', pero no han sabido cuidar lo más importante en sus últimas dos consolas de sobremesa: el jugador hardcore.

Me rindo claro al pelotazo que pegaron vendiendo muchas Wii entre los casual gamers pero no así el software que es lo que realmente sustenta a una compañía. ¿Qué desarrolladora va a querer crear videojuegos para una consola que no le va a reportar las ventas que necesitan siquiera para recuperar pérdidas? No voy a hablar de cifras porque cualquiera puede sacar sus conclusiones indagando un poco en internet y está claro que con la Wii U no están vendiendo lo que esperaban. Le lastra sin duda su antecesora, la desconfianza de las desarrolladoras, el hardware anticuado, pero lo que sin lugar a dudas me ha sorprendido es que los señores de la gran N apenas se han dignado, como sí lo han hecho los chicos de Redmond y Sony, en reunirse con dichos desarrolladores para hablarles de las bondades de su producto. Y he aquí que llega el amigable Reggie Fils y suelta perlas como ésta, o el gran Miyamoto que también ha dicho que no le gustan los juegos que van a sacar sus competidoras en su salida...


Dicho ésto querría responder a los señores de Nintendo que por favor no vendan hardware de hace años a precios tan elevados, que por favor saquen el nuevo Zelda ya, que es lo que todo el mundo espera, y que por favor les pido que traten de seguir a flote porque sería muy triste que mi hijo que tiene poco más de un año no disfrute de las mismas experiencias que su padre, que se divierta y se maraville con los Zeldas, Marios o Metroids que saquen en el futuro. Ánimo Reggie y Miyamoto, les reto a que cierren la boca a los agoreros que como yo ven fracasar a su Wii U en los próximos meses. Muestren un sólido catálogo que les dé una aceptable cuota de mercado para seguir adelante e ilusionar a las futuras generaciones de jugadores empedernidos como el que subscribe.

domingo, 1 de septiembre de 2013

Crítica de 'Kick-Ass 2' (por Alberto Pérez)

¿Kick-Ass 2? Mejor Hit-Girl…

Pongámonos en situación. Año 2010, 'Kick-Ass' se estrena en los cines y automáticamente se convierte en un visionado obligatorio. Rápidamente entra en el selecto grupo de lo mejorcito del año, algo curioso ya que a pesar de no tener mucho éxito en taquilla fue la segunda película más descargada de ese año después de 'Avatar'. El boca a boca fue un factor fundamental en su éxito, mucha gente recomendó a sus amigos ver esa nueva peli de superhéroes 'reales' por tener buenas dosis de violencia y ser divertida a rabiar, pero otros la recomendamos únicamente por esa ácida, deslenguada y letal heroína de 11 años que nos dejó prendados desde que apareció en pantalla.
 
En esta segunda parte llamada en nuestro país 'Kick-Ass 2: Con un par' (habría que darle un premio al maquinote que se dedica a traducir a nuestro idioma los títulos de las películas que llegan a nuestros cines…) lo que se vislumbraba en el 2010 ahora se hace realidad, y como bien digo en el título de la reseña, esta secuela bien podría llamarse perfectamente Hit-Girl. ¿Por qué? Porque sin duda alguna esta chica es el alma de la cinta y le roba protagonismo a absolutamente todos los miembros del reparto cuando sale en pantalla. De hecho, es su historia lo que más llama la atención y el interés del espectador: su historia personal, ese debate interno que tiene entre hacer aquello para lo que ha sido entrenada desde su infancia o la promesa hecha de adaptarse a una nueva vida alejada de la peluca morada y el cuero, sus problemas en el instituto con las chicas de su misma edad… Evidentemente la peli tiene su trama (totalmente continuista con la primera parte) pero personalmente son aquellas en las que aparece Mindy/Hit-Girl las que más me han gustado.

 ¿Más momentos pulgar arriba? El ritmo es rápido y consigue que no se te hagan pesadas la poco más de hora y media que dura; las escenas de acción (destacando la de Madre Rusia contra los policías y la de la furgoneta en la autopista) son chulísimas y brutales; Jim Carrey está bastante correcto y es el mejor personaje adaptado del cómic a la pantalla, hace lo que tiene hacer sin histrionismos ni 'carreyadas'; la reflexión que deja la peli (o que al menos yo entendí) de que si uno quiere ser un héroe ha de serlo por querer que el bien reine, no motivado por venganzas personales; Chloe Grace Moretz…
 
¿Momentos pulgar abajo? Peca un poco de previsible y no es tan original como su predecesora (algo por otro lado entendible); algunos cambios que han habido respecto al cómic, por ejemplo, entiendo que viendo como es el segundo tomo del cómic de Mark Millar hayan suavizado la violencia, pero no me gusta que hayan mantenido como un cachondo y torpón al personaje del hijoputa cuando en el cómic se convierte en un verdadero villano cuyos actos le hacen totalmente digno del nombre de pila que adopta; la escena final, ya que tenía lugar de forma épica en un Times Square lleno de superhéroes y supervillanos y no en el cuartel general de los malos... 

Resumiendo, no llega al nivel de la primera parte en cuanto a originalidad y frescura pero gracias a la línea continuista que sigue es totalmente disfrutable, sobretodo para todos aquellos que se lo pasaron pipa con la primera parte. A todos los que como yo se enamoraron de Hit-Girl y de la actriz que la interpreta, tranquilidad, independientemente de que haya o no una tercera parte de la saga, tenemos actriz para rato...