lunes, 9 de diciembre de 2013

Crítica de 'Sólo Dios Perdona' (por Alberto Pérez)

 
Reconozco que he tardado bastante en hacer la crítica de ésta película, de hecho fui a verla un día después de su estreno en cines, pero no quería dejarme llevar sólo por mi primera impresión y quise dejarla reposar un poquito y darla una segunda oportunidad unas semanas después para o bien tratar de ver todas aquellas cosas que pude haber dejado escapar en mi primer visionado, o reafirmarme aún más en lo que pensé de ella al verla. Ya os adelanto que ha sido más lo segundo.

Soy uno más de todo ese grupo que sintió interés inmediato por este proyecto desde el momento en el que se supo que el binomio formado por el director Nicolas Winding Refn, y el actor Ryan Gosling estarían detrás del mismo. Un equipo que funcionó a las mil maravillas en su anterior colaboración, 'Drive', una joyita que me cautivó en el 2011. Y ese, queridos amigos, fue mi mayor error, porque a pesar de que sabía de sobra que 'Sólo Dios Perdona' no iba a tener absolutamente nada que ver con 'Drive', la manera en la que se nos vendió la peli a través de trailers y promos distaba mucho de la cinta intimista que finalmente llegó a los cines.
 

"Julian (Ryan Gosling) es un solitario chico que dirige un club de boxeo en Bangkok como tapadera de una organización ilegal de drogas. Un día, su violento hermano es asesinado tras haber abusado y matado a una prostituta, y movido por el odio y las ansias de venganza de su madre (bastante pasada de vueltas, por cierto) decide buscar al responsable. Ésto le llevará a enfrentarse a Chang, un policía jubilado que cuenta con el respeto de todos los demás policías y que se encarga de impartir su propia justicia por la ciudad como una especie de ángel de la venganza".

Como se entiende sólo con leer la sinopsis, la venganza y posiblemente la redención, son sin lugar a dudas los motores de la película. Es indudable la gran calidad visual que tiene la película, con esas imágenes cargadas de neones y en las que el director intenta contar a través de variados simbolismos bastantes cosas sin necesidad de usar diálogo (de hecho hay poquísimo diálogo en los más de 80 minutos que dura la peli) pero todo eso es insuficiente para mí. La cinta parece más bien un desvarío del director que me dejó la sensación de no entender bien lo que estaba viendo, hasta el punto de pensar que era una broma. ¿Qué hay del pasado de los personajes? ¿Por qué no se explora más esa relación incestuosa de Julian con su madre? ¿Qué es lo que realmente motiva al Ángel de la venganza?
 
 
Todo esto es personal y desde luego como digo al principio de la crítica, me ha ocurrido por las altísimas expectativas que tenia de ella tras ver 'Drive', pero es que no hay por donde cogerla. Ni siquiera los pequeños momentos de violencia extrema/gore que tiene (perfectamente rodados) la salvan. De hecho, otro de los puntos que me fastidia es que se nos vendió, o al menos a mi me pareció que la lucha final entre Julian y Cheng sería el perfecto clímax de la peli con un buen reparto de golpes, pero otro planchazo más porque reparto desde luego que hay aunque lo que se dice equitativo...

Resumiendo, una cinta que no es apta para todo el mundo y totalmente extremista: o te encantará o no te gustará nada, no creo que exista término medio. Como curiosidad, desde que tengo uso de razón y voy al cine, jamás había visto a 14 personas irse de una sala, o escuchar una estruendosa e incrédula risa general con el momentazo karaoke del final de la peli. Avisados quedáis.

 
"La venganza es el manjar más sabroso condimentado en el infierno"
(Walter Scott)
 
Alberto Pérez

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